Por qué usamos el Credo de los Apóstoles en Grace Church of Philly


Por qué usamos el Credo de los Apóstoles en Grace Church of Philly

De vez en cuando escucho preocupaciones de personas bienintencionadas que cuestionan nuestro uso del Credo de los Apóstoles. La mayoría de las veces no tiene tanto que ver con el contenido, sino con su historia personal de haberlo recitado en la Iglesia Católica Romana o en una iglesia confesional liberal. Parte de su historia de conversión es que, al comprender el Evangelio de la salvación sólo por la fe en Jesucristo, abandonaron un sistema religioso que había corrompido y confundido el Evangelio. Nos alegramos con ellos por su conversión y su decisión de abandonar un sistema religioso defectuoso.

Sin embargo, al utilizar el Credo de los Apóstoles y otros credos antiguos estamos reclamando a los sistemas religiosos corruptos lo que pertenece al cristianismo histórico. El contenido del credo es totalmente bíblico y generalmente aceptado por los evangélicos de todo el mundo. Aunque hay algunos matices sobre cómo se entiende "descendió a los infiernos", la mayoría estaría de acuerdo en que hay una base bíblica para la idea. En nuestra recitación optamos por omitirla. Otros se ofenden con la frase 'santa iglesia católica' porque asocian erróneamente 'católica' con católica romana. En realidad, católica es una buena palabra que destaca la expresión universal y mundial de la Iglesia de Jesucristo. Sustituimos "católica" por cristiana para dar cabida a algunas de esas sensibilidades y malentendidos.

El credo simplemente expone una representación antigua e histórica de la fe cristiana. No establece cómo se llega a ser cristiano. Sí, es posible creer y recitar el credo y no ser cristiano, del mismo modo que es posible recitar el Padre Nuestro o rezar una "oración del pecador" y no ser cristiano. No obstante, el credo es útil como herramienta catequética para los creyentes, pero sólo en segundo lugar como herramienta apologética para los no creyentes. Entendemos que tanto los creyentes como los no creyentes necesitan algo más que el credo.

Hay que admitir que, aunque recitamos el credo con regularidad en la Grace Church de Filadelfia, no estamos totalmente satisfechos con el credo, no por lo que dice, sino por lo que no dice. Si yo hubiera formado parte del "comité de redacción del credo", habría dejado clara la obra expiatoria de Cristo. Por alguna razón no fui invitado a ese comité. Aquí en la Iglesia Grace de Filadelfia, estamos comprometidos a estar centrados en el evangelio. El Evangelio es la buena noticia de que Jesús, el Rey Redentor, ha venido. En el corazón de las buenas nuevas está 'Cristo murió por nuestros pecados'. Puesto que no hay expiación sustitutiva en el credo, no hay predicación del evangelio en el credo. Por eso digo que el credo es principalmente una herramienta catequética para los creyentes, no una herramienta apologética para la evangelización. Es tanto una confesión personal y corporativa como una herramienta de enseñanza para aquellos que ya entienden y creen en el evangelio.

En contextos en los que el Evangelio ha sido eviscerado, el Credo de los Apóstoles no es más que una vana repetición, al igual que la recitación del Padre Nuestro y el canto de "Santo, Santo, Santo" por parte de muchos católicos romanos, muchas iglesias ortodoxas y todos los liberales teológicos. Pero, en contextos donde el evangelio salvador de Jesucristo es central, el credo reafirma elementos de la fe cristiana histórica. Cuando es recitado por aquellos cuyos corazones están siendo transformados por el Evangelio, el Credo de los Apóstoles se convierte en una confesión sincera, personal y corporativa de la fe cristiana, no en una vana repetición.

La confesión que comienza con: "Creo en Dios Padre, Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra...", se fundamenta en lo que ya hemos confesado y seguimos confesando" "que Cristo murió por nuestros pecados según las Escrituras, y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día según las Escrituras."

compartir

El 10 de septiembre de 1970 comprendí el gran amor de Dios por mí, pecador y rebelde. Aquella noche recibí el perdón de Dios y una nueva vida a través de Jesucristo, que murió en mi lugar y resucitó para ofrecerme perdón y una nueva vida. He sido pastor principal por más de 30 años plantando dos iglesias en Buckingham, PA y Queens, NY y sirviendo otras dos iglesias en Brooklyn, NY y Roslyn, PA. Actualmente soy el pastor principal de Grace Church of Philly.

Comentarios

  1. [...] Nos alegramos con ellos por su conversión y su decisión de abandonar un sistema religioso defectuoso. más Autor: Steve Davis 08 21st, 2011 in Vida de Iglesia No Comments [...]

Leave a Reply to Urban Missional » Why We Use the Apostles’ Creed at Grace Church of Philly Cancel reply

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *.