Evangelización y discipulado en un mundo post-todo

por John Davis

Estas son algunas reflexiones dispersas sobre cómo hacer ministerio en un mundo post-todo:

a. Hacer evangelismo y discipulado en el contexto de la comunidad.

b. Haz que tu conversación con los precristianos y los jóvenes cristianos se parezca más a un baile lento que a una guerra.

c. Reconocer la necesidad de pertenencia de un post-todo antes de creer.

d. Ver la evangelización como un proceso integral, no sólo la "salvación de almas".

e. Darse cuenta de que, aunque Jesús es el único camino hacia Dios, hay muchos caminos hacia Jesús.

f. Redescubrir que la apreciación de la belleza a menudo precede a la aceptación de la verdad.

g. Nuestro evangelismo debe mostrar que la "metanarrativa" de las Escrituras es de compasión y no de abuso de poder. 

h. Dado que el sufrimiento es un universal para todos los seres humanos, debemos mostrar cómo el mensaje bíblico responde mejor a las cuestiones del sufrimiento. 

Nuestra vocación de ministrar en un mundo post-todo debería evidenciar lo siguiente:

1) apertura a la tarea,

2) curiosidad por la historia de otro,

3) una empatía dispuesta a reír y llorar con los demás,

4) la voluntad de esperar una invitación,

5) el deseo de crear un lugar de provisión, donde nos ocupemos de los perjuicios de vivir en un mundo caído.

Por último, si los cristianos queremos ejercer eficazmente nuestro ministerio, debemos recuperar la alegría y la humildad.

John Davis

El 10 de septiembre de 1970 comprendí el gran amor de Dios por mí, pecador y rebelde. Aquella noche recibí el perdón de Dios y una nueva vida a través de Jesucristo, que murió en mi lugar y resucitó para ofrecerme perdón y una nueva vida. He sido pastor principal por más de 30 años plantando dos iglesias en Buckingham, PA y Queens, NY y sirviendo otras dos iglesias en Brooklyn, NY y Roslyn, PA. Actualmente soy el pastor principal de Grace Church of Philly.