El Evangelio para la ciudad en Génesis 21-22
por John Davis
En Génesis 21-22 se pone a prueba la fe de Abraham en que Dios bendeciría a las naciones a través de su descendencia. Isaac, el hijo a través del cual se cumplirá la promesa, se ha convertido para Abraham en la prueba visible de esa promesa. La pregunta que subyace en Génesis 22 es la siguiente: ¿Sigue dependiendo la fe de Abrahán de la Palabra de Dios o se basa ahora en la presencia física de Isaac? ¿Abraham camina por fe o por vista?
Abraham recibe la orden de ofrecer al hijo de la promesa como sacrificio. Abraham, en obediencia al Dios que le llamó y creyendo que Dios resucitaría al hijo de la promesa, lleva a su hijo a la cima del monte y lo deposita sobre el altar del sacrificio. Dios impide que Abraham mate a Isaac y le proporciona un sacrificio sustitutivo.
La promesa de una descendencia numerosa y de bendición para las naciones se confirma de nuevo a Abraham.
Abraham modela la fe de todos los verdaderos seguidores de Cristo. Creyó que Dios podía resucitar a los muertos.
Hebreos 11:17-19 17* ¶ Por la fe Abraham, cuando fué probado, ofreció á Isaac, y el que había recibido las promesas estaba en el acto de ofrecer á su hijo único, 18 del cual fué dicho: "Por Isaac será llamada tu descendencia." 19 Consideró que Dios era capaz incluso de resucitarlo de entre los muertos, de donde, hablando en sentido figurado, lo volvió a recibir.
Como Abraham, nuestras acciones presentes se basan en nuestra fe en las acciones futuras de Dios. Además, vivimos al otro lado de la resurrección de Cristo y estamos llamados a una fe aún más profunda. El Dios que ha resucitado a Jesús de entre los muertos es el Dios que nos asegura que por la fe participamos en su resurrección. Inmediatamente a través de la fe recibimos nueva vida en el reino inaugurado de Jesús y en última instancia se nos asegura la vida resucitada en el reino consumado de Jesús.
La prometida descendencia de Abraham que bendeciría a las naciones ha llegado. Somos receptores de esa bendición, así como mediadores de esa bendición para las naciones. Por eso los seguidores de Cristo evitan el orgullo étnico; deploran el racismo y el monoculturalismo. Muchos creyentes de hoy están invirtiendo la huida de los blancos que abandonaron las ciudades por los suburbios más seguros. Se dan cuenta de que las ciudades son el lugar donde se congregan las naciones del mundo y de que el Rey Jesús es un rey para las naciones. Hoy en día, en la mayoría de las grandes ciudades, se puede obedecer literalmente el mandato de Jesús de "ir por todo el mundo y hacer discípulos de todas las naciones."
Puestos recomendados
Resumen - El Evangelio en Génesis 1-50 y en la ciudad
23 de octubre de 2017
El Evangelio para la ciudad en Génesis 47:28-50:26
16 de octubre de 2017
El Evangelio para la ciudad en Génesis 46-47
25 de septiembre de 2017
Scan the QR code or visit https://pushpayapps.net/k/gcphillyapp.